Los zapatos o zuecos Crocs se han hecho mundialmente famosos, pero ¿son realmente buenos los Crocs para los niños?
Tanto mayores como niños los usan a diario por su tacto, comodidad y capacidad de limpieza.La marca Crocs, Inc. es una fábrica de calzados fundada por el empresario George B. Boedecker, Jr. para producir y distribuir un diseño de zueco adquirido de la empresa canadiense Foam Creations. El primer modelo producido por Crocs, Crocs Beach, salió a la luz en 2002 en el Fort Lauderdale Boat Show,y vendió los 200 pares producidos en ese momento.
Crocs ya ha vendido más de 300 millones de pares de zuecos de caucho en 90 países del mundo.
La resistencia al olor, el ajuste superior, que sea antibacteriano y que no se marque, hace del material Croslite la principal diferencia entre Crocs y sus imitaciones y competencia.
Lo cierto es que, los zapatos Crocs son geniales para ir al parque, playa, piscina o jardín, donde se pueda pisar algo difícil de limpiar en un calzado normal. Estos zuecos con meterlos debajo del grifo o darles un manguerazo o con una bayeta húmeda están listos para la siguiente puesta.
Pero, ¿son buenos para los niños? ¿Qué piensan los podólogos sobre este calzado?
Pues, parece ser que, a los podólogos, no les entusiasman demasiado. Para los niños es aconsejable que los lleven en determinadas ocasiones pero no todo el día y, menos todos los días.
Según la Doctora Megan Leahy (experta podóloga de Chicago), «no se debe abusar de este calzado porque no asegura el talón de una forma apropiada. Si el talón no está bien sujeto, tendemos a apretar los dedos, cosa que puede causar tendinitis o empeorar los problemas en las uñas, las deformidades en los dedos, los callos y las durezas. Las consecuencias pueden ser las mismas con cualquier chancla o zapato sin sujeción en el talón».
EL Doctor Alex Kor (presidente de la American Academy of Podiatric Sports Medicine), por su parte manifiesta que; «Únicamente hay dos tipos de pacientes a los que les puede venir bien usar estos zuecos: a aquellos que tienen el puente muy marcado o a aquellos que sufran de edema en las piernas o en los tobillos»
«Yo no recomendaría llevarlos durante 8 o 10 horas bajo ningún concepto».
Por tanto los niños y tampoco los adultos deben abusar de este calzado tan cómodo y fácil de limpiar.
Para niños muy pequeños deberíamos quitárselas al poco tiempo ya que si a ellos le sudan los pies no nos lo dirán y acarreará problemas a largo plazo para los pies del niño.
Fuentes:
www.wikipedia.com
www.huffingtonpost.es
